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Monday, November 21, 2005
DANZA CONTEMPORÁNEA
Tres coreógrafos independientes producen esta vez junto al Ballet Contemporáneo del Teatro San Martín, que dirige Mauricio Wainrot. Las tres propuestas resultan muy intensas, pero cada una de ellas provoca al espectador de muy diferente manera.
El mundo mágico de "En cero", de Roxana Grinstein, se va introduciendo en el tiempo apasionado y hasta violento de "Saharaui", de Roberto Galván, para, finalmente, tornarse casi desolación en "Simple", de Gustavo Lesgart.
En las tres coreografías también se impone una investigación sobre un complejo entramado de relaciones en las que el cuerpo es siempre el centro, ya porque comenzando en soledad sale a tratar de encontrarse con los otros y termina en igual estado de indefección ("En cero"), ya porque una sociedad de pautas extremadamente determinantes -la árabe saharaui- hace de ese cuerpo un valor para la guerra y, en la tercera -"Simple"-, ese cuerpo desarrolla acciones comunes para encontrarse con otros, pero sólo un poema parecería imponerse en el final.
La palabra asoma, y con ella, una idea: el habla descubre algo más fuera de la corporalidad, y en la quietud con la que esas palabras se escuchan otra realidad parece descubrirnos y también acosarnos. En "En cero", Roxana Grinstein desarrolla al máximo un tiempo de ensoñación que adquiere verdadera poesía en las coreografías masculinas. Hay allí una síntesis magnífica que descubre una oposición sobre la que trabaja: la ausencia/la necesidad de ocupar un lugar, y entre ellas una profunda desolación. La misma asoma en el trabajo de Roberto Galván, aunque sus hombres y mujeres poseen trazos muy definidos y sus acciones y sus tiempos reflejan una acabada manera de relacionarse, tradiciones de por medio.
Finalmente, Gustavo Lesgart descubre en su característico estilo de trabajo físico unas intensidades conmovedoras que va construyendo, siguiendo un juego creativo siempre muy vital. Porque aunque su final resulte inesperado, tiene una fuerza particular que lleva a seguir buscando, en el otro, algo preciso que posibilite seguir andando, creyendo. Y un final poético que resalta lo más hondo de la ternura del hombre.
Con una compañía muy sólida que demuestra una profunda adhesión al trabajo de los diferentes artistas, la nueva propuesta del Ballet Contemporáneo del San Martín demuestra, una vez más, en esta temporada, su profunda y sensible capacidad creativa.
Debr!ns -
11:11 AM